Se dice que Mercedes usa motores Renault y así es. Su origen es un acuerdo entre Daimler y la alianza Reanult-Nissan en el año 2010. Dicho acuerdo ha permitido el uso de motores Renault en Mercedes, entre otras cosas, como el desarrollo conjunto de los Smart y los Renault Twingo.
Este acuerdo de colaboración entre Daimler y la Alianza Renault-Nissan ha tenido diversos frutos:
1) Daimler ayuda a Renault a mejorar la calidad de sus productos.
Mercedes ha ayudado a la Alianza Renault-Nissan a mejorar la calidad de sus últimos desarrollos, aportando su know-how, especialmente en lo tocante a procesos productivos, pruebas y ensayos de componentes y vehículos, y dotación tecnológica.
Daimler e Infiniti producen motores turbo de 2,0 litros en una planta en común, en Tennesse (EE.UU.).
2) Daimler suministra motores y cajas de cambio Mercedes a Infiniti.
Los Infiniti Q30 y Q50 usan algunos propulsores y cajas de cambio de origen Mercedes. El bloque turbodiésel de 2,1 litros y 170 CV se encuentra en ambos modelos, así como el 2.0 turbo de 211 CV, también presente – con diferentes niveles de potencia – en los Mercedes Clase A y Mercedes CLA, entre otros modelos compactos de Mercedes. Mercedes también ha suministrado cajas de cambio de doble embrague y siete relaciones a Infiniti.
3) Desarrollo conjunto de los smart y Renault Twingo.
Los Renault Twingo y smart forfour comparten plataforma y hasta que smart anunció su paso a la movilidad 100% eléctrica, también compartían motores de tres cilindros y 0,9 litros, con hasta 109 CV en el caso del montado en los smart Brabus y Twingo GT. Ambos coches se producen en la misma línea de fabricación, en Francia.
Aunque Mercedes ha colaborado en su desarrollo, las Mercedes Citan son Renault Kangoo con otra cara.
4) Mercedes Citan y Renault Kangoo.
Uno de los primeros frutos del acuerdo de Renault y Daimler fueron las Mercedes Citan, basadas en las Renault Kangoo y producidas en Francia. Son esencialmente el mismo vehículo. Ambos vehículos usan motores diésel de origen Renault – concretamente los 1.5 dCi K9 que se fabrican en nuestro país – con potencias de entre 80 CV y 116 CV.
5) Nissan Navara, Mercedes Clase X y Renault Alaskan.
Estas tres pick-up – de posicionamientos muy diferentes – han sido un desarrollo de Nissan, que ha cargado con el grueso del I+D y know-how en nombre de la Alianza Renault-Nissan. Estas pick-up comparten chasis, cajas de cambio, tecnologías y motores, un 2.3 dCi de doble turboalimentación y hasta 190 CV, desarrollado por Nissan.
6) Infiniti Q30.
El Infiniti Q30, y su primo crossover el Infiniti QX30, podrían ser considerados las versiones japonesas de los Mercedes Clase A y GLA de la anterior generación a la actual. Sí, estos dos Infiniti comparten plataforma con los Mercedes compactos de tracción delantera, así como motores diésel y gasolina, a excepción del 1.5 diésel de acceso, que es de origen Renault en los Infiniti. Los mandos del equipo de infoentretenimiento o las pantallas de información del coche son 100% Daimler.
7) Acuerdos en vehículos comerciales.
Mitsubishi FUSO Truck and Bus Corporation y Nissan poseen varios acuerdos de colaboración activos actualmente. FUSO es parte de la división de vehículos comerciales de Daimler desde hace años, y Nissan les suministra modelos como la NV350, que FUSO vende en Oriente Medio como CanterVan y tambien provee el camión ligero NT400.
Mercedes monta motores Renault, motores que han pasado una validación de calidad y han sido avalados por Mercedes.
8) Los motores de la “discordia”
Nissan, Renault y Mercedes comparten muchos motores, y debemos superarlo. Los motores de la discordia son los bloques 1.5 dCi de origen Renault, el mítico bloque K9 evolucionado desde hace años por la marca francesa y fabricado en territorio nacional, en Valladolid. Este motor ha superado desde hace lustros sus problemas de juventud y hoy en día es un propulsor agradable, probadísimo, de buen tacto y muy bajo consumo. Este motor de acceso se monta por el momento en los Mercedes Clase A, Mercedes Clase B y Mercedes CLA, en las versiones denominadas comercialmente 180 d.
El diésel de 1,5 litros se lleva montando desde 2012, cuando se lanzó el Mercedes Clase A de segunda generación. El resto de motores diésel de estos tres coches son de origen Daimler: las versiones 200 d ya usan el eficiente OM654q de nueva generación. Recientemente, Mercedes y Renault han desarrollado un nuevo motor 1.3 turbo de gasolina, un cuatro cilindros producido, entre otras instalaciones, en Valladolid. Este propulsor se puede encontrar tanto en coches como el Renault Mégane, como en toda la gama compacta de Mercedes, incluyendo los todocaminos Mercedes GLA y Mercedes GLB. También usado por Nissan, y en nuestros Dacia como los Duster, Dokker, Lodgy.
El 1.3 TCe es un motor que cumple los estándares de calidad de todas las marcas que lo emplean, con un desarrollo exigente y exhaustivo. Además, como antes hemos explicado, los smart fortwo y forfour empleaban motores 0.9 TCe turbo de origen Renault, al menos hasta que la marca decidió abandonar al completo la combustión interna y pasar a ser 100% eléctrica.
Nos guste o no, este acuerdo de colaboración es uno de los más exitosos de la industria, y cada vez se expande más y más: con la compra de Mitsubishi por parte de la Alianza Renault-Nissan, las posibilidades de este puzzle crecen aún más.
Fuente:
https://www.diariomotor.com/reportajes/mercedes-motores-renault/